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OCTUBRE MISIONERO

De nuevo nos encontramos con la posibilidad de celebrar un mes en el que la vida se palpa como un acontecimiento que desborda todo aquello que encierran nuestras pequeñas expectativas.

Es el mes de misiones y Tú, Jesús, eres Buena Noticia, en un mundo que parece que hemos ido dejando que se nos apague la capacidad de sorpresa. Gracias porque siguen habiendo hombres y mujeres valientes que han creído que la misión les espera, gracias porque ellos nos animan a vivir la misión allí donde discurre nuestra vida.

Te pedimos Jesús, que nos libres de la tentación de pensar que no tenemos nada que ofrecer, nada que anunciar, nada que regalar a los demás. Danos la valentía que ha movido a tantas personas en la historia a no solo dar cosas sino a entregarnos alegres para construir un mundo más humano y con más esperanza.